¿Qué dicen feministas, ecologistas, gitanos?

#Crónicaucraniana

Siempre hay que preguntar a las minorías o, sin ser minoría, sobre todo a las mujeres, para saber qué grado de cultura y progreso ha alcanzado una sociedad. Durante estos días que estoy en Lviv he tenido ocasión de escuchar a activistas de organizaciones diversas que hablan de la situación interna de Ucrania respecto a temas sensibles como feminismo, racismo, destrucción ecológica. Esto es lo que podido recoger de sus informaciones y opiniones, tras el filtro de las traducciones de ucraniano a inglés o, a veces, en francés.

 Ksenia, una mujer activista del grupo Feminist Workshop, nos cuenta que en las ciudades o pueblos ocupados por los rusos la situación es muy difícil para las feministas. Muchas activistas han sido asesinadas. Esto y otras brutalidades han hecho que la gente normal que nunca se había metido en política haya salido a protestar contra las tropas rusas en la calle.

“Las tropas rusas incorporan la homofobia como parte oficial de la nueva situación en tierras ocupadas. Es una cultura patriarcal dominante que ataca a la cultura europea como “gai-europea”. Y eso se traslada a los políticos de nuestro país. Los militares rusos y el ejército defienden la idea de que, si los políticos no son capaces de satisfacer a las mujeres, es por ese motivo que hay lesbianas en Ucrania. No se trata sólo de una guerra por defender la tierra y la independencia de nuestro país, sino también por nuestros valores”.

En Járkiv y otras ciudades las activistas van a recibir a las personas que llegan como refugiadas de otros lugares, sobre todo mujeres y niños. Se han constituido cinco cooperativas feministas. Hacen masages, pircings y otros servicios para contribuir a una vida normal. En ellas hay jóvenes llegadas de todas las regiones de Ucrania y toman las decisiones por consenso. El 80% de las activistas están integradas en el la defensa territorial luchando por la victoria de Ucrania. De hecho, hoy es el país europeo donde las mujeres tienen más peso en la defensa armada. En general, el 50% de las mujeres están en tareas de defensa.

Ulyana Ustinova, de la Fundación KSENA Charitable explica la grave situación de explotación sexual de las mujeres ucranianas. Las redes mafiosas se han incrementado y hoy hay muchas mujeres que han sido enviadas para esta explotación a Rusia, Polonia y Turquía. Es el negocio del porno.

Iryna Yuzyk, de People’s Action aborda las violaciones a mujeres y niñas. Se trata de una violencia sexualizada cuyo objetivo es la destrucción emocional. La violación es una tragedia no sólo personal sino también social por sus efectos. Por ejemplo, la decisión de abortar a veces las mujeres la toman fuera de plazo seguro y eso comporta muchos problemas pues se criminaliza el aborto ilegal y es más peligroso. También la legalización del uso de armas puede convertirse en un peligro para mujeres, niñas, niños. La guerra trastoca las normas tradicionales y patriarcales y, por lo tanto, que las decisiones sean sólo de los hombres plantea un conflicto.

Iryna Yuzykm, de Acción Popular, dice que en las ciudades muchos hombres han perdido la vida y sólo quedan las mujeres y sus hijos. Han perdido sus trabajos y fuente de alimentación. Tienen una red de médicos internacionales que manda medicinas y su organización las distribuye por el frente en el ejército y la defensa territorial. Los anarquistas tienen su cooperativa y trabajan dentro de la defensa territorial. Pero se queja que el transporte del material es muy alto, entre 5 y 7 mil euros.

Serhii Mouchan es miembro de Operación Solidaridad, una red de resistencia antiautoritaria que ya existía antes de la guerra. Uno de sus objetivos ahora es la defensa de las mujeres. El primer periodo tras la guerra fue caótico, reunieron activistas de toda ideología: de izquierdas, sociales, anarquistas. Organizan envíos de materiales allí donde hace falta y cuentan con el apoyo de sindicalistas.

Julian Kondur representa a la Fundación de Mujeres Gitanas, Roma Women Fund. Para él no hay diferencia entre la implicación ideológica de una ONG y el Movimiento Social (nombre de una organización de izquierdas) porque están ambos implicados socialmente.

La mayoría de gitanos provienen del Este y Sudeste y sufren una situación de marginación. Pero la mayoría están ahora en el ejército. Las mujeres y niños sufren una situación dramática cuando cruzan la frontera porque los gitanos no tienen papeles. La estrategia para buscar su defensa ha sido acogerse a la cláusula europea de protección de las minorías. Con ellos el gobierno ha decidido crear un gabinete especial para poder dar documentación a esas personas. Necesitamos ayuda de los europeos para poder salir más fuertes en derechos después de esta guerra. También señala que la mayoría de medios de comunicación rusos desfiguran los ataques a gitanos en Ucrania para  presentarnos como una sociedad racista y violenta.

Oleh Stavytskyi, de la organización ecologista Ecodia muestra en un contador la cantidad de millones que los países europeos y del mundo están pagando a Rusia por el gas, petróleo y carbón. La suma es realmente enorme. La petición de su organización es que haya un boicot a estos productos. 

Durante una charla que tuvimos con varios grupos ecologistas de Ucrania me entero de cómo los oligarcas se están aprovechando de la situación de guerra. Por ejemplo, Ucrania dedica la mitad de todas sus tierras a la agricultura y buena parte a la exportación de granos, semillas. Los rusos han minado parte de las tierras, entonces el gobierno está promoviendo decretos en los que puedan ser invadidas zonas naturales protegidas. También la invasión de las zonas naturales sirve para poder edificar.

Una de las campañas que llevan desde hace un tiempo es la defensa del bosque primario de los Cárpatos, en la región de Svydovets. Esta es una región casi única del Centro y Este de Europa que se extiende desde Chequia, Polonia, Hungría, Ucrania y también Rumanía y Serbia. En la parte de Ucrania están talando el bosque primario para hacer una estación de esquí. La guerra está pues dando nuevas “oportunidades de negocio” a costa de la naturaleza y de la gente pobre que no puede comprar tierras al estado, pues la mayor parte del bosque es del estado.

Una carta de 40 organizaciones ecologistas ucranianas pide la entrada a la Unión Europea. Su objetivo es que, formando parte de la UE podrán acogerse a leyes ambientales más proteccionistas. En el debate surge la pregunta: pero si la Unión Europea sabe que mucha de la madera de Ucrania sale de zona protegida ¿por qué no pone un freno a las empresas europeas que la importan? Al final aceptan que también hay mucha hipocresía en la UE, pero creen que estarán mejor dentro que fuera.

Alfons Bech

8 de mayo de 2022